¡Hola de nuevo! ¿Qué tal? Yo muy contenta porque ya he resuelto uno de los temas que más me preocupaba de cara a mi regreso al trabajo. ¡Os cuento!
No sé si lo había comentado antes, pero
mi beca postdoctoral se reactiva en septiembre (ahora mismo la tengo parada para poder cuidar de Paula),
y todavía no sabía qué iba a pasar con mi peque. Vosotros diréis...
"pues que vaya a la guardería, muy sencillo".
Pero no es tan fácil, al menos
no aquí en Berlín.
Resulta que para empezar
la mayoría de niños berlineses van a la guardería a partir de los 3 años.
Si la llevas antes, tienes que "justificar" el motivo (ya sea trabajo, aprender alemán, etc). Si no tienes un motivo no te aceptan al niño en la guardería "pública" y por tanto se hace casi imposible llevarlo a la guarde porque prácticamente no existe ninguna privada. En fin, eso
para mí no es un problema puesto que yo la quiero llevar a la guardería porque vuelvo al trabajo. Aún así, tampoco es tarea sencilla. ¿Que por qué? Pues porque
en Berlín hay casi más niños que plazas de guarderías, y la gente los apunta en las listas de espera antes de nacer. Y claro, cuando yo me quedé embarazada, bastante tenía con elegir hospital, encontrar matrona, preparar papeles en alemán, etc, etc... como para además acordarme de buscar guardería. Así que
cuando me decidí a buscar una guardería para Paula, digamos que iba ya con el tiempo justito...
Bueno, pues
lo primero que hice fue buscar unas cuantas guarderías (
Kitas, en alemán) que estuvieran
cerca de casa. Les escribí emails a todas y
la mayoría me contestaron que no había plaza hasta el verano de 2016. Otras me dijeron que fuera a la charla introductoria para padres, pero que plazas no había... Así que
al final me decidí por ir a la charla de una Kita bilingüe. No por Paula, que seguro que aprendería alemán enseguida... sino por mí, que
quiero entenderme sin problemas con los educadores. En la charla nos hablaron de la pedagogía que utilizan en la guardería, nos enseñaron las instalaciones... y entendí por qué no encuentro plazas.
¡Allí había padres embarazados en los que la futura mamá aún no tenía ni barriga! Paula era la mayor de la reunión, y no tenía ni cinco meses. Como sospecharéis...
tampoco le dieron plaza. Así que he tenido que pensar en una opción B:
¡las Tagesmutter! Eso sí, mientras tanto apuntaré a Paula en la lista de espera de otras guarderías para el año siguiente... que no me vuelva a pillar el toro.
Bueno, ¿y qué es una Tagesmutter? Fácil. En español se traduciría como "madre de día" y es una cuidadora de bebés, que suelen ser pequeños (de 0 a 3 años máximo), y que como máximo puede cuidar de 5 niños a la vez. Después de visitar unas cuantas he encontrado una que habla español y que me ha encantado. Es súper cariñosa con los niños y además me la ha recomendado otra amiga que trabajó con ella. Es boliviana, y además cocina a diario para los peques unos guisos que ya los quisiera yo para mí, Paula no va a poder quejarse... No puedo estar más contenta con la elección de mi Tagesmutter. Son públicas y están controladas, tanto ellas como sus instalaciones, por el ayuntamiento.
Peeeero... además de contenta estoy un poco preocupada. A mí me cuesta atender a Paula y tenerla contenta... y somos un one-to-one. Cuando la lleve a la Tagesmutter tendrá 10 meses, y allí será una persona para cinco niños. Considerando que Paula solo duerme (y permanece dormida) en brazos, no quiero pensar cómo se va a tomar las siestas allí. Espero que le pase como a otros niños, que dicen que por imitación, o por no se sabe qué motivo, en la guardería hacen cosas que en casa no (dormir sola, en este caso). Lo deseo con todo mi corazón por ella y por mí, porque como le dé por llorar como llora aquí cuando la suelto, no sé qué vamos a hacer. No quiero adelantarme a los acontecimientos y preocuparme por ello todavía, pero no paro de darle vueltas. Ummmm....
Ahora toca ponerme con el papeleo para pedir el Kita-Gutschein al ayuntamiento. Básicamente es un papel en el que en función de nuestros ingresos nos dirán cuánto nos cuesta la guardería de Paula (además de cuántas horas nos dejan llevarla... que ya os digo que antes de los 3 años, no siempre te dejan). A ver si consigo aclararme con los papeles en alemán...
En fin, pues eso es todo. Quería contaros mi aventura buscando guarderías, y lo que son las Tagesmutter. Son una figura muy habitual en Berlín, pero me consta que en España no tanto, y que a la gente le parece un poco raro... Aún así, si busco "madre de día" en google, ya empiezan a aparecer algunas en España. Lo malo es que al no ser algo oficial, no están controladas por el ayuntamiento, ni reciben ayudas, ni nada de nada... Pero bueno, poco a poco.
Si tenéis alguna palabra de aliento o alguna experiencia con niños de "alta demanda" que van a la guardería, soy toda oídos. Mientras tanto aquí seguimos Paula y yo, disfrutándonos la una a la otra. ;-) ¡Besotes!