¡Buenos días! ¿Qué tal? Yo ya estoy de vuelta, tras una semana de lo más ajetreada organizando cosas para el bebé y preparando la guía de nuestro próximo viaje a Nueva York. Va a ser un viaje muy especial por muchas cosas... por un lado será el primero que hagamos junto con mis padres y los padres de Carlos, y por otro será el último viaje que haremos antes de que nazca nuestra pequeñaja. Y además estaré "super" embarazada para entonces. Así que con todas esas "particularidades", seguro que va a ser un viaje memorable.
Pero bueno, hoy lo que os vengo a enseñar es una receta de postre sin azúcar que hice en casa la semana pasada: tartaletas de queso y lima (o mini cheescakes de lima). Hace unos meses, como ya os contaré en un futuro post más personal, me detectaron en unos análisis "resistencia a la insulina". Así que de un día para otro tuve que dejar de comer azúcar y harinas blancas. Por ese motivo hace tiempo que no subo ninguna receta de postres. Pero con el tiempo, nos hemos ido adaptando. Carlos ha aprendido a hacer paellas con arroz integral por mucho que le pese (¡gracias cariño!) y yo soy capaz de hacer algunas cosas dulces sin azúcar, como mojitos o la receta que os traigo hoy de mini cheescakes. ¡Os cuento!
Yo hice muy poquitas tartaletas (sólo seis), porque somos solo dos en casa. Así que usé los ingredientes que veis arriba. Las cantidades os las comentaré en cada paso, pero lo hice bastante a ojo, y como el queso siempre está bueno, si echáis más o menos no vais a tener problemas.
Lo primero que hay que hacer es triturar medio paquete de galletas digestive, integrales y sin azúcar. En España
las venden por ejemplo en Mercadona, de la marca Gullón. De hecho yo me las traigo de allí, porque en Berlín no he encontrado donde comprarlas. Por mi resistencia a la insulina, necesito que sean integrales y sin azúcares añadidos... pero si no tenéis el mismo problema que yo (o no sois diabéticos), podéis usar cualquier otro tipo de galletas.
Una vez trituradas las galletas (se puede hacer a mano con el mortero, como hice yo), tenéis que mezclarlas muy bien con un poco de mantequilla. Eso sí, mantequilla derretida unos segundos en el microondas. No hagáis como yo, que eché el pegote de mantequilla directamente del frigo, y no había manera de mezclarlo.... Es lo que tiene experimentar con cosas nuevas. Al menos me sirve para avisaros de que no cometáis el mismo error. ¡Usad mantequilla derretida!