Fiesta para anunciar el sexo del bebé: Gender Reveal Party

    ¡Buenos días! ¿Cómo lo lleváis? Yo ya os podéis imaginar... disfrutando los últimos días de no-papás con Carlos, y aprovechando las horas en las que él trabaja para estudiar alemán, bloguear, descansar y experimentar con recetas sanas (ya sabéis, integrales y sin azúcar). Pero lo que os vengo a contar hoy, es una moda estadounidense que poco a poco está llegando a España: la organización de fiestas para anunciar el sexo del futuro bebé, o como la llaman al otro lado del charco, la "Gender Reveal Party".

    No sé si ya lo he comentado alguna vez, pero mi cuñada y colaboradora del blog Sonia, también va a ser mamá, aproximadamente un mes y medio después que yo. El caso es que hace unos meses, justo cuando Carlos y yo estuvimos de vacaciones por España, se le ocurrió la fantástica idea de organizar una fiesta para anunciar el sexo del bebé a toda la familia. ¿Y qué es eso? ¡Os cuento!

    Una "Gender Reveal Party" es una fiesta en la que los futuros papás anuncian si el bebé será niño o niña. Muchas veces, ellos mismos esperan a descubrirlo en la propia fiesta. Ese fue el caso de Sonia y su marido Sergio, que pidieron a la ginecóloga que no les revelara el sexo del bebé, sino que se lo escribiera en un "sobre secreto". Y luego con este sobre, fueron a una pastelería en la que encargaron una tarta de fondant cuyo color "interior" fuera azul o rosa, dependiendo de si el bebé iba a ser niño o niña. ¡Y todo esto aún sin saber ellos mismos si esperaban un peque o una pequeñaja! No sé si yo hubiera sido capaz de esperar... Pero ellos sí que lo fueron, ¡y mereció la pena!

    Sonia diseñó varias invitaciones con el programa online y gratuíto Canva (del que ya os hablé hace un tiempo), que repartió entre los invitados a la fiesta:

    Como veis, todos los asistentes tenían que ir vestidos de azul o de rosa, y así indicar si su apuesta era que el bebé iba a ser niño o niña.

    Un vez ya en la fiesta no faltó detalle... Sonia decoró su casa con guirnaldas, con las ecografías del bebé, con magdalenas integrales y sin azúcar (para que yo pudiera comer), con banderines....

    Además, pusieron una pizarra para que los asistentes sugiriéramos nombres para el futuro bebé.

    Tras la comida (una comida un poco tensa por los nervios, ¡imagináos!) los futuros papás por fin partieron la tarta ante la expectación de todos los invitados y.... 

    ¡Bizocho rosa! ¡Así, por fin, descubrimos que vamos a tener una sobrina! La verdad es que fue una fiesta divertida y un momento muy emocionante.

    Así que ya sabéis, si vais a ser papás, esta una forma original y divertida de transmitir la noticia. Seguro que en breve empezamos a ver fiestas de este tipo por todas partes a este lado del charco :). Mientras tanto yo ya os he contado la de mi cuñada, para que podáis inspiraros si queréis hacer una parecida. ¡Muchos besos y feliz semana!