Llevo una semana con ganas de pegar el washi tape que me traje de Tokio en todo lo que veo. Veo fruteros, lámparas, flexos y jarrones llenos de colores. Y como ya se sabe... el hecho de visualizar algo con todas tus fuerzas ayuda a que se materialice. Pues esta mañana, las fuerzas del universo (a través de mis inocentes manos) han hecho de las suyas. Nuestro jarrón made in Ikea (que ya se sabe que Ikea amuebla las casas de todos los que viven en el extranjero "temporalmente"), sus bambús, sus piedrecitas y su pollo, han sido atacados por el washi tape de corazones.
Aquí tenéis también el cartel de bienvenida que le preparé a Carlos junto a una cena superromántica para recibirle de su último viaje de congreso. ¡Gasté todos los tipos de Washi Tape que traje! :-P
Yo creo que me quedó bonito y a Carlos le encantó. Qué más se puede pedir. ¡Hasta la próxima entrada!
:)
:(
;)
:P
:D
:/
:x
:*
:O
:S
:|
B)
:w
:a
:))
:((
O:)
7:)
7:P
X(
(:|
=))
I-)
2:P
=DD
X_X
:!!
:q
^_^
:ar!
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